Entre los objetivos principales de la Unión Europea se encuentra la reducción del consumo de energía y la prevención del despilfarro energético.
Los estados miembros de la UE se han comprometido a reducir para el 2020 el consumo de energía primaria en un 20%.
El sector de la edificación representa el 40% del consumo energético total de la UE. Por tanto la reducción del consumo de energía en este sector es prioritario.
Un primer paso para asumir los objetivos de reducción del consumo energético es la obligación de los estados miembros de la UE de adoptar una metodología de cálculo de la eficiencia energética de los edificios y poner en marcha un sistema de certificación de la eficiencia energética de los edificios.
Des del 1 de noviembre de 2007 es obligatorio que los edificios de nueva construcción dispongan del certificado de eficiencia energética.
Esta obligación des del 1 de junio del 2013 es de aplicación para edificios o viviendas existentes que se quieran vender o alquilar.
La finalidad de este certificado es la de dar una información sobre el consumo energético de los edificios así como las recomendaciones relativas a las posibles mejoras teni
endo en cuenta especialmente los siguientes elementos:
– las características térmicas del edificio (capacidad térmica, aislamiento, etc.)
– la instalación de calefacción y de agua caliente.
– las instalaciones de aire acondicionado
– la instalación de iluminación incorporada
– las condiciones ambientales interiores
– la influencia de otros elementos como la exposición solar local, la iluminación natural, etc.
Newgasil dispone de técnicos especialistas en este campo para la realización del proyecto de certificación energética y la tramitación de la etiqueta final a l’Institut Català d’Energia.
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